Hoy es el momento de creer que podemos lograrlo, hoy es el
día y la hora, hoy es la situación correcta, estamos ante un mundo que se detiene
en la injusticia para sacar fotografías y publicarlas, estamos ante un mundo
que cree que con publicar y hablar de más solucionara las cosas, estamos llenos
de dolor por el país, de muertes injustas, de delitos que no solo avergüenzan al
país sino que dejan mucho dolor en los corazones de varias familias, hoy es el
momento de creer en que todo puede mejorar, hoy es el momento de ayudar al que
lo necesita, es el momento de tener fe y creer en Dios para que podamos ser
mayoría, con el afán de que el bien triunfe y nuestros corazones estén
satisfechos buscamos transparencia, buscamos a gente que crea y en base a esta
creencia cambie y proponga así otro cambio a favor de esta noble causa enlistémonos
entonces tomemos nuestra armadura de amor y nuestra espada de dulzura que sea
la cual impacte en aquellos corazones perversos y destructores que sea nuestra
alma pura que trascienda, que sea nuestro honor el que triunfe y que este
triunfo se enamore de quien más lo necesite para poder entonces hacer la
diferencia.
Recuerdo el día como si hubiera sido ayer, ese día en el que nos enteramos de tu llegada, fue una oleada de ilusiones, preocupaciones e incertidumbre pero sobre todo de amor, un pequeño pedacito de los dos y del gran amor que sentimos crecía dentro de mi. Desde el primer momento todos te esperábamos con tanta ilusión, eras tan deseado mi pedacito de cielo, tus abuelos se enojaron un poco, pero fue más fuerte el amor que sentían ya por ti que nada más importó. Toda tu familia se sentía muy emocionada por tu existencia. Recuerdo la primer ecografía, nos asustamos un poco porque no te encontrábamos, la doctora indicó que todo estaba bien, que regresáramos en 2 semanas y claro ahí estabas tú, una pequeña bolita en este mundo tan grande, pero con tantas ganas de vivir. Eras muy inquieto y muy hambriento por supuesto, al parecer tu fruta favorita era la mandarina y vaya tiempo en el que decidiste eso, pues era el mes de mayo, ¡imagínate! ¡Las mandarinas no se dan hasta en el mes d...
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