Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2022

Lo que la vida nos da

  La vida nos depara toda clase de sorpresas y de situaciones que muchas veces estamos muy lejos de imaginar; entre ellas, unas gratas y felices; y otras duras y llenas de dolor. Pensamos que unas y otras son lógicas y naturales, sabiendo que no solo vamos a disfrutar de las primeras, como tampoco solo vamos a disfrutar de las primeras, como tampoco solo vamos a experimentar y sufrir las segundas. Por eso Dios, ese Ser Omnipotente que nos permitió venir a este mundo, que nos dio ese soplo divino para existir como aves de paso en él, nos dotó de esa fuerza espiritual capaz de soportar con entereza y resignación las duras pruebas por las que tengamos que pasar. Se nos ocurre lo anterior porque ¿Quién de nosotros no ha vivido la profunda pena de perder a un ser querido, que tal vez aferrándose a la vida, luchó con asombroso estoicismo contra la muerte que por fin logró vencerlo, dejando a la familia, que también hizo hasta lo imposible por salvarlo, con un sentimiento de intenso pesar? Pe

Un valioso regalo de Dios

  Nuestro apego a la vida nos hace aferrarnos a ella con increíble tenacidad. No queremos morirnos, nadie se quiere morir, no queremos dejar este mundo aunque esté lleno de maldad y sea nuestro inseparable compañero del sufrimiento. Ni los nuestros quieren dejarnos partir, y en ese afán, hacen hasta lo imposible por retenernos; y es lógico, porque la existencia como invaluable regalo de Dios, es hermosa, a pesar de todo. Pero el destino es implacable y no hay poder humano que pueda cambiarlo. Es por eso que el Todopoderoso con su infinita bondad nos concede la capacidad necesaria para aceptar con resignación y conformidad, esos momentos difíciles que vivimos cuando un ser querido, cuando alguien que es parte de nuestro propio ser, rebasa el umbral de lo desconocido, de la muerte. Y lo lloramos porque nos duele su separación, porque nos tortura su recuerdo, pero a medida que el tiempo pasa, ese dolor se va haciendo cada vez más llevadero y el recuerdo menos lacerante, y ese profundo vac

Un aliado infalible

  Cómo lloramos a un ser querido que se va para siempre. Cómo nos duele su partida pensando que jamás nos resignaremos a perderlo. No podremos acostumbrarnos a su ausencia ni consolarnos nunca porque su muerte nos deja un doloroso vacío imposible de llenar.  Pero a medida que los días pasan y casi sin percibirlo, nuestro dolor se va atenuando, la conformidad poco a poco va invadiendo nuestro ser, la herida va cicatrizando hasta llevarnos al momento de aceptar la realidad. No cabe duda que el tiempo es un aliado poderoso que ayuda con su paso a aliviar nuestra pena y a disipar nuestra tristeza, diluyéndola lentamente hasta darnos la tranquilidad espiritual que necesitamos. La pérdida de un ser querido, de alguien que es parte de nuestra propia vida, es uno de los golpes más duros que podamos recibir, por eso sacude la totalidad de nuestros sentimientos hasta hacernos llegar a pensar que difícilmente nos recuperaremos, pero Dios, Todopoderoso, con su infinita misericordia, nos da la fuer

Hasta pronto Don Lenchito

  Ilustre literato, melifluo poeta, egregio periodista, sabio maestro e ícono toneco, maravilloso ser humano cuya brillante sonrisa manifestaba su buen humor y cuyas palabras expresaban su inconmensurable sabiduría, inspirador de este blog como creador del icónico periódico La Palestra, como herederos de su legado en textos, poesías y lecciones, admirándolo y guardando su obra, con un caluroso abrazo hacia el cielo le decimos hasta pronto a Don Lenchito, y les invitamos a leer no solo sus textos ya escritos que publicamos en La Nueva Palestra, sino también los nuevos escritos que publicará Don Lenchito próximamente, los cuales podrán leer en el cielo estrellado redactados con trazos de luz sobre el firmamento💫😇✍🏼.

Un verso hasta el cielo

  Un último verso trazado desde la tierra hacia el cielo pone punto y final al último poema escrito con papel y tinta, abriendo la portada de un nuevo libro que será escrito con trazos de luz sobre el firmamento. Un último abrazo antes de partir, recibo su pluma para continuar el legado, aún no estoy listo para tomarla, pero la recibo como la última lección de mi maestro favorito, enseñándome que la mayor maestra es la vida misma, y que con amor hay que vivir y recibir su cátedra, incluso si a veces algunas de sus lecciones nos desgarran, y aunque a veces estemos tristes y la muerte sea ineludible, se debe amar sin medida y hay que recibir las desgracias siempre con una sonrisa, y señalando al firmamento hacia la nube más pequeñita, me dice bromeando y riendo que ese será el suave y acogedor asiento donde se sentará, y que si no lo veo no es porque no esté, sino que por su baja estatura y lejanía talvez no lo alcance a ver. Entonces desde el centro de su amado pueblo San Antonio Huista

¿Por quién doblan las campanas?

  Con la profunda angustia hecha un nudo en la garganta, y a veces, con la dolorosa sorpresa de una muerte inesperada, llega la separación física de un ser querido, dejando en el corazón de todos los suyos, la profunda pena de su ausencia y un doloroso vacío imposible de llenar. Pero ni modo, ante los designios de nuestra Creador, nada puede hacerse, sino aceptar con resignación su voluntad y agradecerle el privilegio de habernos permitido vivir y disfrutar de esa dádiva divina, por el tiempo que Él decida concedérnosla, porque cuando la hora llega, no hay poder humano que pueda retrasar el reloj que marca la duración de nuestro destino. Cuando el final se presenta de manera inesperada, conmociona los más profundos sentimientos de la familia, sacude violentamente las fibras más sensibles de quienes estupefactos y acongojados, ven partir al amigo que se va de manera imprevista, a la hermana que no tuvo tiempo de despedirse, al ser querido que sin decir adiós se va para siempre, dejando

Un doloroso vacío

  No cabe duda que toda muerte, cualquiera que sea la víctima, el motivo y la forma en que se dé, provoca en nuestro espíritu un sentimiento de pesar, haciéndonos pensar que como humanos estamos expuestos a sufrir en el momento menos esperado un golpe de tal magnitud, por lo que no podemos permanecer insensibles ante el dolor de los demás y nos unimos calladamente a él, y lloramos en silencio. Tampoco cabe duda que el desenlace doloroso, el golpe final a una vida que quizá se ha aferrado al mundo con desesperado tesón y que ha luchado valientemente contra un mal invencible, deja en el alma una herida y el sabor amargo de la impotencia ante la dura realidad de la vida y de la muerte. Porque el que se va, independientemente de la edad, de la razón y la forma de su muerte, deja, en quienes se quedan y son o fueron parte importante de su existencia, ese doloroso vacío de desolación y amargura que solo se llena con lágrimas y recuerdos. Pero tenemos que aceptar la realidad, que ante el mand

Homenaje al amor

Hoy es un buen día para el amor recordar Un momento para ver las estrellas brillar Tu par de ojitos brillantes imaginar Y tú manera de amar extrañar   Que fuiste un amor de primavera fugaz Un eterno compañero de vida veraz Una pausa en medio de todo el desorden Y un motivo especial para el orden   Pues tu vida era un himno de verdad Un sueño de amor hecho felicidad Que en la vida me enseñaste la fidelidad La verdadera mirada de la sinceridad   Del sol disfrutamos en especial Nuestro compañerismo era lo esencial Con ternura me enseñaste a no enojarme Y con tu paciencia habrías de escucharme   En la vida fuiste mi leal compañero Y en la muerte mi gran amigo eterno Que del amor poco he de conocer Pero contigo lo llegaba a reconocer   Hoy entre lágrimas agradezco la oportunidad de conocerte Bendigo a Dios porque me dio la oportunidad de tenerte Pues tus cuatro patas aún puedo escuchar Y mi vida aún contigo imaginar   Y en las noches