Al llegar la noche,entro a mi cuarto sin encender la luz y siento tu ausencia muy dentro de mi ser, me acuesto en mi cama y escucho las canciones que me dedicaste y me envuelvo en llanto.
Mientras lloro voy recordando los momentos felices que vivimos, me rio y lloro, pero lloro de rabia al recordar que te perdí por mi culpa.
La noche se siente larga, quisiera dormir y no puedo, al cerrar mis ojos te veo y te siento, quisiera no abrirlos pero la culpa me invade y me hace abrir los ojos, dándome cuenta de que no te tengo y no te tendré.
Recuerdo esos momentos en los que nos demostrábamos amor sin miedo, esos momentos en los que parecíamos ser los únicos en el mundo, no existía el tiempo ,las tristezas, enojos, tan solo no existían los problemas.
Pero ahora, ahora siento que soy una persona que ve al mundo en su contra, como por necesidad, vivo por necesidad, pero no por amor, no por apreciar la vida.
Sin ti mi vida pasa frente a mis ojos, se va como el agua que corre en el río, tengo que vivir con esto todos los días y en especial por las noches, noches que se hacen eternas.
FUHRER
Quetzaltenango,7 de marzo de 2020.
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