Que cerca
está la muerte ¿no?
Está al
lado tuyo susurrando al oído lo cercana que se encuentra, que se encuentra al
lado tuyo todo el tiempo, todo este tiempo. Pero claro, no te has percatado de
eso, al contrario huyes de ella y cuando escuchas algo relacionado te
mortificas, te afanas por no pensar ni escuchar más; seguidamente elevas una
oración al Todopoderoso para que a ti no te suceda, para que a ti no te toqué, ¡¡¡TODAVÍA NO!!!
¿Acaso no
te das cuenta? Estas al borde de ella (la muerte), todos los días, horas,
minutos, segundos… “ESTA AQUÍ”
No temas a
la muerte deberías saber que es algo normal, es inherente al ser vivo puesto que
cuando eres concebido esa es la consecuencia inmediata adquirida. RECUERDA, ALGÚN DÍA LLEGARÁ, no te espantes; y si es que aún no lo procesas, no seas
mediocre con tú existir y VIVE o al menos convive con la idea de la evidente
muerte y enséñale que no tienes miedo, que en vez de eso vivirás, gozarás y
cuando el TIEMPO llegue estarás feliz por aprovechar la oportunidad que la
muerte misma te dio.
Bueno… Con
esto me refiero a que algún día te iras, tú cuerpo ya no existirá, tu presencia
ya no se encontrará.
Si es
cierto, cuando ya no tengas ni una chispa de existencia todos llorarán, todos
se lamentarán por no haber compartido más de algo contigo y claro, siempre
habrá alguien que deseará regresar el tiempo para decirte lo importante que
eras, lo orgulloso que estaban de ti… aunque todo sea una cruel y despiadada
mentira porque con el tiempo te olvidarán… todo por lo que luchaste y
esforzaste se desvanece, se esfuma… YA NO EXISTES, ¿Acaso no te interesa
entonces?
MORIRÉ, LO SÉ, ESTOY DESTINADA A ESO… PERO ANTES
TRANSFORMARÉ ESTE MUNDO… LO PROMETO.
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