Solamente 365 Días Al Año.
Otro año que queda atrás, son tantos momentos que quedan en mi corazón, personas nuevas entraron a mi vida, viví momentos de alegría, de felicidad en donde sientes que el corazón se saldrá de su lugar porque no encuentras las palabras para expresar lo que sientes, momentos de tristeza, en los que solo quieres llorar sin que nadie te diga nada, solo tú en tu habitación, momentos de enojos en los que nadie te entienden y solo te critican, pero cada momento conlleva una enseñanza, cada situación sucede por una razón, los planes de Dios son perfectos aunque en el momento en el que suceden no lo entendamos, más adelante nos daremos cuenta, no el porque, sino el para que.
No tenemos que cuestionar a Dios, tenemos que aceptar sus planes porque él sabe lo que hace, él nunca querrá hacernos daño, siempre buscará nuestro bien aunque nosotros no lo entendamos.
Puede que tengamos dificultades, problemas, tristezas hasta llegar al punto de sentir que no podemos más, pero ningún día es malo, solo son diferentes, tenemos que aprender a vivir cada día como si fuese el último, tenemos que aprender a perdonar y a pedir perdón no importa cuanto nos cueste, cuando se pide perdón, llegas a sentir una paz en tu interior porque sabes que estás haciendo las cosas bien, tenemos que amar intensamente, arriesgarnos, disfrutar de nuestra familia, amigos y seres queridos, decirles cuanto los queremos porque no sabemos cuando será la ultima vez que los veamos, amemos sin límites, disfrutemos de las cosas lindas de la vida y aprendamos de los problemas, pero sobre todo no dejemos de ser felices, porque una vida sin felicidad no es vida, y ese es el propósito de Dios para nosotros sus hijos, que tú seas feliz, que él sea feliz, que yo sea feliz, que todos seamos felices, no importa lo que hagamos, si barres la calle, si eres maestra o maestro, si te dedicas a la música, si eres médico, abogado, ingeniero, arquitecto, estilista, ama de casa, no importa, lo importante es que seas feliz, que ames lo que haces.
Son solamente 365 días al año, cada noche de cada día, tú te vas a la cama con la esperanza de despertar al día siguiente y muchas personas no lo logran, las que sí, somos inmensamente bendecidas porque en cada despertar Dios no da una nueva oportunidad para levantarnos y hacer las cosas bien, para estar en paz con él. Gracias a Dios terminaré mi año con todas las personas que amo, que me importan y que yo soy importante para ellas, puedo decir que fue un año de dicha, de bendición, de armonía y de mucho provecho, tuve problemas claro, pero supe aprender de ellos.
Espero que así sea con todos ustedes, los invito a que luchen por sus sueños, por los anhelos del corazón, que se arriesguen, que perdonen y que amen intensamente pero sobre todo que dejen de buscar la felicidad en donde no está, dejen de anhelar los bienes de los demás, valoren lo que tienen al rededor, busquen a Dios y les aseguro que serán felices.
Les deseo a todos un hermoso, bendecido y lleno de felicidad año nuevo 2018.
Sueños de Escritora.
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